Se propone una arquitectura acogedora, con vocación de convertirse en el gran lugar de descanso y disfrute de la expo de Milán. Frente a grandes arquitecturas intensas y abigarradas, ofrecemos un gran espacio público exterior de descanso, una PLAZA, como mejor representación de la cultura y el modo de vida  al aire libre  en España. Vivimos LA CALLE, disfutamos de nuestro ocio en la calle, incluso comemos en la calle… sea pues éste, el modelo espacial que nos represente.

RESPUESTA AL LUGAR

La parcela presenta una forma de L con acceso desde el lado corto, generando una larga crugia estrecha, con una dilatación final rectangular. Resulta determinante la existencia de una plaza de uso compartido con el pabellón adyacente, destinada a usos de actividades al aire libre, de libre disposición. Planteamos una propuesta que genera un suelo creciente desde el acceso, totalmente accesible al visitante, que genera de forma natural una gran terraza de total accesibilidad, además de  dos elementos de graderío hacia la plaza exterior de eventos. Esta cualidad de Arquitectura totalmente permeable, genera la cualidad de acogimiento y descanso pretendido, contribuyendo de este modo al éxito del futuro Pabellón. Se disponen exteriormente de elementos de bancos y merenderos, protegidos por elementos ligeros y replegables de textil para sombreamiento, así como un sistema de enfriamiento evaporativo, que generen un mejorado confort térmico para los meses de verano. Esto unido a la cualidad natural del los graderios como eventual elemento de asiento,  conforman este gran espacio público de descanso.

LA CALLE EXPOSITIVA

La exposición principal también hereda la tipología de Calle Exterior en su formalización. Una Calle semiexterior , que recorra nuestra cultura, gastronomía, ocio y paisaje, envuelta en una piel seductora y sorprendente .No es una exposición cerrada más, es una experiencia expositiva de gran intensidad y atractivo.